lunes, 8 de enero de 2018

El sacerdote Juan Piña ha pasado a la presencia del Señor



El final de año nos trajo una triste noticia para nuestra iglesia y para el ecumenismo. Se nos fue Juan Piña, todos sabíamos que estaba enfermo y en nuestras oraciones siempre le tuvimos presente, pero el Señor le llamó ante su presencia. La noticia la recibimos en el culto dominical y el dolor ante su pérdida nos ha dejado conmocionados.
Juan fue un esforzado hombre de Dios, que trabajó por el evangelio desde el conocimiento y práctica del mismo. Su personalidad, su talante humanista, liderazgo, el respeto hacia nuestra confesión y su cercanía hacia el prójimo, al igual que su voz, caló entre todos profundamente.
Él junto a nuestro antiguo pastor, José Luis Troncoso, inició los cultos y actos ecuménicos, que se han venido celebrando durante algo más de 25 años.

Hoy sabemos que se ha perdido un servidor de Dios. A su congregación actual y a los hermanos y hermanas del Santo Cristo, con los cuales nos vinculan lazos de amistad y hermandad, queremos hacerles llegar nuestro pesar, al igual que a sus familiares. Pero también queremos expresarle las palabras que ese mismo domingo de su fallecimiento tuvimos en el leccionario de la iglesia, las palabras de Simeón: “Ahora, Señor, despide a tu siervo en paz. Conforme a tu palabra; Porque han visto mis ojos tu salvación”. Todos los que amamos y respetamos a Juan sabemos que Él había visto la salvación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario